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Viernes, 17 Mayo 2024

CORREOS ESTA SOBRESATURADO.

La elevada carga de trabajo ha provocado diez cambios de repartidor en dos años.
Hace tres años, Navia era una parroquia del rural vigués en la que residían apenas 1.200 familias, con sus 1.200 respectivos buzones postales, vigilados y alimentados por un cartero que recorría la zona en su moto amarilla. Era sólo uno, aunque se bastaba para llevar con solvencia su saca a todos los rincones de una de las pocas parroquias tranquilas de la ciudad más efervescente de Galicia. Pero, cosas del progreso, la expansión de Vigo le ha cambiado la cara al barrio y, de paso, ha dejado al cartero sin resuello.
Lo denunciaba ayer el sindicato UGT, desde el que advertían de que aquellos mil buzones de la Navia rural se han triplicado. Y con ellos han llegado los problemas a los grandes edificios de viviendas protegidas que definen el horizonte de la parroquia. Según el delegado de UGT en Correos, José Canal, «hoy un solo cartero tiene que atender 1.800 buzones más que hace dos años, todos en el polí­gono residencial». Y eso son 5.000 habitantes adicionales, a los que se unen decenas de negocios y oficinas, para sumar un total de 3.000 buzones, que hacen que el cartero esté «desbordado» y su moto, asfixiada.


La consecuencia directa de esta sobredosis de sellos es que las cartas llegan con retraso. «Por ley hay que repartir en cada domicilio cinco días por semana, y en muchos casos se está haciendo sólo dos. Los enví­os van tarde. Por ejemplo, las notificaciones de una reunión de la comunidad de vecinos se entregaron días después de que se celebrase -relata el delegado de UGT. Es una anécdota, pero hay casos graves, porque entregamos muchos burofax y correos certificados, notificaciones, facturas y documentos que a veces no admiten retraso».
En Correos, mientras tanto, explican que la situación de Navia no es alarmante. El responsable de distribución en Vigo, José Rivero, afirma que «no hay retrasos, porque cuando el trabajo desborda la previsión, se refuerza el servicio». «Ahora hay un cartero en Navia, que tiene el apoyo de otro cuando es preciso. Y para no incumplir la exigencia de que haya cinco días de reparto por domicilio, trabajamos los sábados», argumenta.
En Correos, mientras tanto, explican que la situación de Navia no es alarmante. El responsable de distribución en Vigo, José Rivero, afirma que «no hay retrasos, porque cuando el trabajo desborda la previsión, se refuerza el servicio». «Ahora hay un cartero en Navia, que tiene el apoyo de otro cuando es preciso. Y para no incumplir la exigencia de que haya cinco días de reparto por domicilio, trabajamos los sábados», argumenta.

Correos estudia abrir una sucursal pese a que «no ha habido quejas».
En Correos están dispuestos a mejorar el servicio en Navia, aunque aseguran que aún es pronto para tomar decisiones. «Navia no es sólo un barrio nuevo; va a ser casi una ciudad entera. Por eso no encargaremos el estudio para aumentar el número de carteros en la zona hasta que esté al menos la mitad del polí­gono», analiza el responsable de Distrución en Vigo, José Rivero, que advierte de que hasta ahora «no ha habido quejas de los vecinos».
Pese a ello, Rivero es consciente de que pronto habrá que dotar a la zona de medios. Entre ellos, se planea la apertura de una sucursal en una zona que ahora depende de la oficina de Bouzas. «De momento estamos viendo las necesidades, porque la situación está equilibrada», concluye.

Video extraido de: agalega

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